Que el olvido no se olvide de quien fue

Cristiano Ronaldo: La mayor competición del mundo futbolístico llora su marcha.

El luso dice ‘adiós’ a las citas mundialistas tras caer ante Marruecos. A sus 37 años se despide de lo que parece su último Mundial. Cris, gracias por este último baile.

Nos hacemos mayores, pirlistas. Ayer gritábamos los goles de Kanouté, Luis Fabiano, Pandiani… alucinábamos con las jugadas de Arango, Simão, Diego Forlán… cantábamos el «Waka Waka» de Shakira y veíamos el fútbol en ‘La Sexta’ con aquellas míticas narraciones de Andrés Montes. Él mismo, en su primera y última retransmisión, quiso dejar un mensaje a todos sus oyentes: «La vida puede ser maravillosa».

Y que verdad Don Andrés, pero como hacemos para no ver la vida un poquito más «fea» si se están yendo los más grandes. Hoy es Cris, el «Bicho», rico, guapo y buen jugador… hoy el mundo del fútbol llora. Pronto hablaremos de él en pasado, como un jugador de nuestra adolescencia, nuestros hijos nos preguntaran quien era y por qué él con 60 años está mejor que nosotros con 35.

Nadie se esperaba que Portugal se marchara tan pronto, al igual que nadie se esperaba la suplencia de Cristiano en un partido de unas dimensiones tan grandes, y es que, esto es un Mundial, amigos, y aquí quien no corre vuela, y si no decídselo a En-Nesyri, el ariete marroquí logró el tanto con un salto de 2’78 metros, gol que supuso la eliminación de los lusos. Tras quedarse fuera de la competición el «Bicho», vía Instagram, dio las gracias a todo aquel que le había apoyado en todos estos años y dejó un mensaje que deja su futuro abierto:

Gracias Portugal. Gracias Catar. El sueño fue lindo mientras duró… Ahora se espera que el tiempo sea buen asesor y permita que cada uno saque sus propias conclusiones»

Cristiano Ronaldo

Si veo a alguien jugando una Copa del Mundo con 41 años es a Cristiano Ronaldo, ya me ilusioné bastante con mi ex como para ilusionarme con esto, pero es el único jugador que tiene las características y la mentalidad para conseguirlo. Pese a ello, hay que ser objetivos, y aunque las despedidas duelan, Cris, que lástima pero adiós, me despido de ti y me voy.